evidencia |
saber hacer |
prevención |
equidad |
personalización |
eficiencia |
proximidad |
igualdad |
continuidad |
especialización |
inclusión |
diversidad |
comunidad |
autonomía |
promoción |
redistribución |
transformación |
asistencia |
escala humana |
derechos |
Podemos expresar en diez frases características o apuestas de un modelo de intervención social basado en conocimiento riguroso, buenas prácticas y consensos compartidos. Cada una de las frases incorporará una tensión, deseablemente creativa y potenciadora, que atraviesa dicho modelo:
- Una intervención social basada en la evidencia, es decir, en el conocimiento científico sobre los resultados de anteriores intervenciones. Sí, pero, a la vez, una intervención social consciente de la importancia del saber hacer relacional basado en la experiencia.
- Una intervención social preventiva, es decir, una intervención que intente evitar la aparición de problemas sociales. Pero también equitativa, es decir, que atienda más a quienes ya sufren en mayor medida dichos problemas.
- Una intervención social personalizada, basada en el diagnóstico social y la prescripción o planificación individualizada centrada en la persona. Sí, pero también suficientemente estandarizada y adecuadamente estructurada para que sus costes sean acordes a sus efectos.
- Una intervención de proximidad, que se acerca a los entornos de la vida cotidiana de las personas y se adapta a sus dinámicas y preferencias en el territorio. Aunque sin renunciar a la igualdad de derechos garantizada por el Estado social.
- Una intervención social favorecedora de la continuidad de los itinerarios de las personas y de las sinergias entre los sectores o agentes implicados. A la vez que capaz de reconocer el valor añadido por la especialización y responsabilidad de cada uno de esos sectores o agentes.
- Una intervención normalizadora e inclusiva, es decir, que ofrece los recursos, actividades y entornos acordes con los valores y estilos de preferencia y referencia para el conjunto de la comunidad o sociedad; a la vez que respetuosa y gestora de las diversidades y del encuentro, atención y empoderamiento de quienes se autodefinen y encuadran como miembros de un colectivo.
- Una intervención social de enfoque comunitario, esto es, que potencia el fortalecimiento y la capacidad instalada de respuesta a necesidades de las redes primarias; siendo a la vez respetuosa de la autonomía de las personas a la hora de elegir sus modelos de relación familiar y convivencia comunitaria.
- Una intervención social promotora y activadora, es decir, que quiere impulsar aprendizajes y participación de las personas; aunque también atenta a la redistribución de recursos que permitan, hoy y aquí, dar respuesta a necesidades de las personas.
- Una intervención social transformadora, que busca modificar estructuras y procesos sociales. Pero que no olvida la dimensión asistencial que también puede tener la intervención social.
- Una intervención microsocial, realizada a escala humana; pero atenta, a la vez, a las estructuras institucionales y marcos legales que garantizan derechos de forma estructurada y estable.
Expondremos estos contenidos, entre otros, en las conferencias a realizar los días 25 y 26 de mayo en la Universidad del Valle y la Universidad San Buenaventura (Cali, Colombia).